viernes, 14 de noviembre de 2014

Amar hasta morir

Ella se rindió a ese fantasma, se entregó sin presentar resistencia alguna. Lo que pasaba era que sus inseguridades la habían consumido al punto de no poder tomar decisiones por si misma. Esto la había hundido en un malestar constante, se enojaba con ella misma por su falta de convicción, ella no solía ser así. Pero ¿qué podía ofrecer ya estando en ese pozo? Primero que nada debía salir. Pero no podía hacerlo acompañada, ni sola. Acompañar en soledad. ¿Cómo se logra? Con amor, siempre amando. Salir de ese pozo, buscar la libertad, y continuar queriendose. Queriendose por ser libres. Queriendose por acompañerse. Queriendose por quedarse o por irse. Queriendose. 

El se fue entendiendo lo que estaba por venir. Dejó las llaves donde las había encontrado y un beso en cada esquina de la almohada. Comprendió que no estaría solo, o si, que llegaría a concebir la soledad con alguien. La libertad de quererse estando solos. La elección de quererse estando solos.

Deberán amar, amar hasta morir.