Me di cuenta que lo quiero al lado mio en un momento de
enojo. Yo estaba en la cama entre llanto y mocos sin entender que es lo que
esta vez me pasaba, cual era la crisis del día, cual de todas.. Me escondí bajo
la colcha y lo escuché suspirar y levantarse. Vino a acariciarme el pelo. Y
mientras yo le decía cosas llorando y abrazada a la almohada, seguramente
gritaba y no tenía idea de lo que estaba diciendo, él me miraba con ojos
enormes llenos de algo que en el momento no pude entender, pero hoy si: mezcla
de amor e incomprensión. Él no entendía nada, nada de nada, y yo estaba ahí
toda rota sin entender porque estaba rota y enojada con estar rota. Y me miró
así. Esa mirada, ese momento, comprendí que quiero seguir abranzadolo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario